La contaminación de napas, arroyos y el lago Nahuel Huapi por el vertido de efluentes cloacales es un problema que se agrava año tras año. Hace un mes el laboratorio de Bromatología del municipio tomó muestras en distintos puntos del lago y algunos arroyos, y realizó un análisis microbiológico del agua. Paralelamente, una empresa privada hizo el estudio físico-químico. De doce muestras, aproximadamente el 50% dio que la calidad del agua no es apta para consumo humano y contiene alto nivel de coliformes. También, en algunos casos se encontraron niveles elevados de nitrógeno y fósforo.
Pero teniendo en cuenta que ya en el lago el agua contaminada que aportan los distintos arroyos se diluye, se desprende que en los cauces de algunos arroyos la situación podría ser alarmante. Asimismo, en verano se produciría un mayor incremento de coliformes por el aumento de la temperatura. De las muestras obtenidas algunas corresponden a los cauces de arroyos que desembocan en el lago, como el arroyo B° Once, que atraviesa el centro de la localidad y carga todos los efluentes de barrios densamente poblados; la toma del río Bonito, antes de atravesar el barrio; y el arroyo que pasa por la planta de tratamiento de residuos.
Sobre el cauce del arroyo del Once, a unos 15 metros de la desembocadura en la Bahía Las Balsas, la cantidad de coliformes -producto de residuos cloacales - registró niveles altísimos. Aunque todavía no fueron analizados a fondo los estudios físico-químicos, en principio también dio alto el nitrógeno y fósforo.
En el cauce el agua no sólo no es apta para consumo humano, sino que tampoco es apta para fines recreacionales. Sobre el lago, y a unos 15 metros de la desembocadura, gracias al filtro del Mallín del Americano, los valores disminuyen, aunque el agua sigue presentando niveles de coliformes muy superiores a lo recomendado para consumo humano (43 NMP/100 ml contra 2,2 que establece como límite el EPAS).
No obstante, tanto el arroyo como en la desembocadura, no son puntos donde comúnmente la gente se bañe o consuma agua.
"En lugares como la desembocadura del Once y Puerto Manzano aumentaron los parámetros de nitrógeno, la contaminación por asentamientos urbanos", señala el bromatólogo municipal, Alejandro Murcia.
El otro punto crítico es el arroyo que pasa por la Planta de tratamiento de Residuos sólidos. Tanto en el cauce como en la desembocadura los análisis son preocupantes, similares a los del arroyo del Once. Según Murcia, hay contaminación por lixiviados, líquidos contaminantes generados por el entierro de residuos de todo tipo.
"El análisis que se hizo no contempla metales pesados, que podría haber, habría que investigarlo".
En tanto, consecuencia de los aportes del arroyo Once y Las Piedritas –entre otros– la Bahía Las Balsas es la que presenta mayor nivel de contaminación.
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